Ángel Marcos y el
país de las maravillas
Paula Morales Buades
Ángel Marcos usa la imagen fotográfica como elemento de
creación, y en este caso de crítica social. En su nuevo trabajo, Alrededor del
sueño 4, nos muestra lo desconocido de las ciudades, como un país que aparenta
ser maravilloso, o eso creemos, esconde el deseo y el sueño de modernidad y
cambio que hubo un día, una magia que las hacía únicas. G.M.B Akas es otro
fotógrafo contemporáneo que un día dijo: Hoy,
me siento orgulloso de ser fotógrafo. Ser
capaz de articular las experiencias de aquellos que no tienen voz, para darles
identidad. Identidad, protagonismo, dos palabras que Ángel Marcos expresa
en su obra mediante las imágenes de cuatro ciudades, que le inspiran y que no
han sido elegidas al azar, ciudades que viven alrededor de un sueño.
En el 2013, Ángel Marcos ya presentó una muestra que se
titulaba Alrededor del sueño en la cual aparecían tres ciudades: La Habana, New
York y Shanghái. Tres ciudades que visitó entre el 2001 y el 2010, pero no se
basó en recopilar imágenes de dentro de la ciudad de los monumentos más
importantes, sino que inmortalizó imágenes de descampados, de barrios
marginales, de las vistas que te puedes encontrar desde un rascacielos,
imágenes que esconden una historia, una revolución; publicidad, paneles que nos
incitan al consumo. Éstas tienen en común una cosa, son ciudades que han pasado
por distintos acontecimientos, pero que al fin y al cabo son lugares donde en
su día hubo un deseo, un sueño, una ilusión de modernidad, de cambio. Por otro
lado, Ángel Marcos ha añadido este mismo año otra ciudad a la muestra: Madrid. Incluso
le cambió el nombre a la exposición por Alrededor del sueño 4. ¿Y que mejor
manera de hacer una exposición sobre unas ciudades desocupadas y destruidas por
la globalización que en la propia ciudad de Madrid?
Otras figuras que reproducían la realidad por la misma línea
que Marcos eran los hiperrealistas que trabajan mediante fotografías para poder
representar en sus cuadros con la mayor fidelidad absoluta, por eso esta corriente
también era conocida como realismo fotográfico. Destacó Antonio López con su
obra “La Gran Vía madrileña”, pintura que representa el globalismo como ha
afectado en Madrid.
La exposición está estructurada por un orden, como si todo
fuera un rascacielos que sigue en pie gracias a la idea de progreso, de
globalización, donde se encuentran los cimientos del rascacielos con imágenes
de La Habana, Shanghái y New York hasta conseguir la máxima altura mediante
imágenes de la ciudad de Madrid, desde fotos antiguas a fotos actuales, desde
lugares populares hasta descampados y barrios desocupados. Se representa un
rascacielos rodeado de sueños perdidos, de calles con nombres de hechos que
marcaron la ciudad, de la mirada pérdida de un vagabundo que está sentado en el
suelo, de señales de peligro como representación de luz, ilusión y deseo, y de
cómo el tiempo pasa. Esta exposición se encuentra en el Canal de Isabel II.
Este espacio está especializado en trabajar con artistas como Marcos, ya que es
uno de los pocos lugares que se dedican solamente a las exposiciones de
fotografías y de imágenes visuales.
Por último, hay que decir que Ángel Marcos es como el conejo
de Alicia en el País de las maravillas, ya que él mismo, mediante sus
fotografías, nos está enseñando que hay detrás de ese agujero en el árbol, que
hay detrás de esos países como Cuba, China, Estados Unidos y España, que de
lejos parecen maravillosos pero cuando te adentras en su sistema y en sus
raíces e historia te das cuenta de que esa gloria, esa ilusión, solamente era
un sueño más entre un millón, ya que no hay nada más real que un sueño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario