Perdidos por el arte

             

                  Patricia Herranz Preysler (1º carrera Historia del Arte)

                         

La exposición “la cara oculta”, obra realizada por Mateo Maté, artista contemporáneo que ya expuso otras obras en diferentes partes del mundo, muestra lo que se esconde detrás de la pintura, lo que nuestros ojos no son capaces de ver. Estas piezas que se presentan nos dan a conocer el soporte en las que el cuadro se apoya, los bastidores. Utiliza éstos en vez de sustentación, como un medio de comunicación entre el artista y el visitante, se trata de laberintos realizados a partir de los bastidores, material compuesto normalmente por madera, ya que ahora podría tratarse de un elemento singular de los cuadros en el cuál podría expresar los acontecimientos pasados por el autor a lo largo de su trayectoria, ya que algunos de ellos reflejan una simplificación por el hecho de estar formados con bastidores construidos de una manera muy sencilla y por el contrario otros, tienen una forma mucho más complicada.

Uno de estos cuadros que destaca por los bastidores cruzados entre sí, es utilizar el llamado 3D (tres dimensiones) para dar volumen a la obra. Mediante estos bastidores, o parte de ellos, el autor ha compuesto lo que se podría llamar un laberinto sin salida puesto que está dispuesto de tal forma que solo hay una entrada pero que no llega al centro de este, dando la sensación de inacabado o cerrado. Otra obra que ha realizado el autor y que a mucha gente se le pasaría por alto, me refiero a los típico separadores que se utilizan en las colas, puesto que están situadas de tal forma que se trata de un nuevo laberinto, pero que esta obra en concreto, puede ser recorrido por nosotros y ver que en algunos caminos no conducen más que a pasillos cerrados, lo que refleja nuestra vida día a día; un cúmulo de situaciones de nuestras ajetreadas vidas y que se ven reflejadas en esta obra.

Por otro lado, este tipo de arte realizado desde hace bastante tiempo, es una técnica que se rebela contra lo normal, es decir, toma como principio para hacer estas obras materiales que antiguamente y ahora se utilizan como soporte para los cuadros. Pero estas obras reflejan el inconformismo con lo normal, lo que se debería hacer, muestra esa rebeldía que muchos llevamos dentro y él la expresa mediante sus exposiciones, esa revolución del arte y que nos enseña que de cosas tan cotidianas que vemos todos los días por la calle, en ello me refiero a la madera y a los separadores que el artista ha empleado para hacer estas piezas que componen su obra.

Por último, habría que destacar que estas obras, por detrás son lienzos en blanco y que en este contexto hacen de soporte y de apoyo para la estructura de la pieza, en tanto que su función cambia y solo tiene la función de estructura para colocar los bastidores, pero no hay que menospreciarlo puesto que sin esta base, la obra no se habría podido llevar acabo y a menudo se piensa que el cuadro solo lo forma el lienzo, pero las personas no se paran a pensar en los bastidores que lo sostienen, como he mencionado antes, todas estas creaciones no salen de la nada, sino que el arte intenta buscar ese secreto que los utensilios y materiales más simples esconden, que se encuentran alrededor nuestro y no nos fijamos en ellos hasta que algunos de estos artistas dan vida a algo tan normal como la madera y por ello hay que descubrir esa esencia que se encuentra oculta a la vista de nuestros ojos.