SUEÑO Y RECUERDO.

Cristina Salomé Gil San Martín (1º Grado Historia del Arte)

     Una vez más Ángel Marcos, natural de Medina del Campo (Valladolid, 1955), autodidacta, no deja indiferente a nadie con su obra fotográfica “alrededor del sueño 4”. Expuesta en la gran sala de la fundación Canal, en el Canal de Isabel II, espacio para el Arte Contemporáneo. Inicia un proyecto en el que por primera vez integra fotografías de una ciudad europea, Madrid y une a ellas fotografías de ciudades tan pintorescas como la Habana, Shangai y Nueva York.  Utiliza la imagen como su herramienta de trabajo y de creación artística.

    Una exposición formada por una obra que destaca por una parte, su gran tamaño y por otra lo hace con iluminaciones traseras, que parecen imitar a señales de tráfico, algo muy representativo de la ciudad de hoy en día. Pero todas ellas con un ingrediente principal, la “ciudad” y el proceso de urbanización globalizado que la afecta (Shangai, Nueva York, Cuba…) como base y junto a estas aparece un sueño europeo representado por la ciudad de Madrid, primera ciudad europea que presenta en su exposición. Una globalización que acaba con unos proyectos colectivos que vienen de lejos, sueños truncados y todo ello plasmado con fotografías impactantes provenientes del extrarradio madrileño, un crecimiento urbano notable especialmente en los últimos dos siglos, donde encontramos grandes edificios, creados por grandes arquitectos, rodeados de desierto y desolación, tristemente atacados por la mano del hombre.

    Un profundo análisis sobre la evolución de Europa y el estancamiento en sus barrios más pintorescos y llamativos del Madrid más tradicional, como el Palacio Real y sus jardines, enmarcados en una serie de cuatro fotografías que tratadas con diferentes técnicas, nos recuerdan a un sueño, el anhelo de un pasado o un bonito momento que recordamos. Y es que son lugares que para cualquier habitante de la ciudad pasan desapercibidos por muchos motivos, ya sea la falta de tiempo, la rutina…pero que en un momento de nuestra vida nos hemos detenido y hemos hecho una pausa. Para plasmar este sentimiento Ángel Marcos crea una nebulosa entorno a la fotografía cada vez más intensa que nos hace adentrarnos en un sueño. También encontramos varios ejemplares en blanco y negro como si de un recuerdo se tratase.

    Una obra impregnada de las diferentes culturas que conviven en una ciudad desde antaño hasta la actualidad, su historia, su distribución…

    En la parte central destaca el depósito desde el que desciende una gran columna vertebral diseñada por el propio artista, donde ha expuesto desde fotografías con el Madrid más castizo, de tascas, tabernas, anuncios publicitarios… hasta los rascacielos que presiden la ciudad con la administración, las financias y los negocios de esta. Un concepto que hace pensar: la ciudad esclava del ciudadano o el ciudadano esclavo de la ciudad. En definitiva es la unión de progreso y tradición. Muestra la vida como una obra de arte.

    Como si de la cámara oscura de Johannes Vermer se tratase. Proyecta una imagen precisa, disminuyendo la luz en algunos casos para adentrarnos en ese sueño y conservando las cosas en su justa medida, sin deformaciones, todo tal y como es no hay más. Una perfecta organización espacial historiográfica que asombra y hace reflexionar y donde vemos reflejado un universo cotidiano.

    Sin duda Ángel Marcos es un maestro del arte visual, sin dejar de perfeccionarse y renovarse en cada una de sus obras. Un gran artista contemporáneo sin duda.